๐—ข๐—–๐——๐—˜ ๐˜† ๐—น๐—ฎ๐˜€ ๐—ฟ๐—ฒ๐—ฐ๐—ผ๐—บ๐—ฒ๐—ป๐—ฑ๐—ฎ๐—ฐ๐—ถ๐—ผ๐—ป๐—ฒ๐˜€ ๐—ฝ๐—ฎ๐—ฟ๐—ฎ ๐—บ๐—ฒ๐—ท๐—ผ๐—ฟ๐—ฎ๐—ฟ ๐—ฒ๐—น ๐—ณ๐˜‚๐—ป๐—ฐ๐—ถ๐—ผ๐—ป๐—ฎ๐—บ๐—ถ๐—ฒ๐—ป๐˜๐—ผ ๐—ฑ๐—ฒ๐—น ๐—บ๐—ฒ๐—ฟ๐—ฐ๐—ฎ๐—ฑ๐—ผ ๐—น๐—ฎ๐—ฏ๐—ผ๐—ฟ๐—ฎ๐—น ๐—ฝ๐—ฒ๐—ฟ๐˜‚๐—ฎ๐—ป๐—ผ ๐—ฒ๐—ป ๐—ฒ๐—น ๐˜€๐—ฒ๐—ฐ๐˜๐—ผ๐—ฟ ๐—ฝ๐—ฟ๐—ถ๐˜ƒ๐—ฎ๐—ฑ๐—ผ

En el marco del proceso de adhesiรณn del Perรบ a la OCDE, las recomendaciones que se vienen dando a nuestro paรญs en materia de relaciones laborales ofrecen una perspectiva distinta a la que suele dominar el debate acadรฉmico y polรญtico: ๐—น๐—ฎ ๐—ถ๐—ป๐—ณ๐—ผ๐—ฟ๐—บ๐—ฎ๐—น๐—ถ๐—ฑ๐—ฎ๐—ฑ ๐—ป๐—ผ ๐˜€๐—ฒ ๐—ฒ๐˜…๐—ฝ๐—น๐—ถ๐—ฐ๐—ฎ ๐—ฝ๐—ผ๐—ฟ ๐—น๐—ผ๐˜€ ๐—ฎ๐—น๐˜๐—ผ๐˜€ ๐—ฐ๐—ผ๐˜€๐˜๐—ผ๐˜€ ๐—น๐—ฎ๐—ฏ๐—ผ๐—ฟ๐—ฎ๐—น๐—ฒ๐˜€, ๐˜€๐—ถ๐—ป๐—ผ ๐—ฝ๐—ผ๐—ฟ ๐—ฑ๐—ฒ๐—ฏ๐—ถ๐—น๐—ถ๐—ฑ๐—ฎ๐—ฑ๐—ฒ๐˜€ ๐—ฒ๐˜€๐˜๐—ฟ๐˜‚๐—ฐ๐˜๐˜‚๐—ฟ๐—ฎ๐—น๐—ฒ๐˜€ ๐—ฒ ๐—ถ๐—ป๐˜€๐˜๐—ถ๐˜๐˜‚๐—ฐ๐—ถ๐—ผ๐—ป๐—ฎ๐—น๐—ฒ๐˜€ ๐—พ๐˜‚๐—ฒ ๐—น๐—ถ๐—บ๐—ถ๐˜๐—ฎ๐—ป ๐—น๐—ฎ ๐—ฝ๐—ฟ๐—ผ๐—ฑ๐˜‚๐—ฐ๐˜๐—ถ๐˜ƒ๐—ถ๐—ฑ๐—ฎ๐—ฑ ๐˜† ๐—น๐—ฎ ๐—ฐ๐—ฎ๐—ฝ๐—ฎ๐—ฐ๐—ถ๐—ฑ๐—ฎ๐—ฑ ๐—ฑ๐—ฒ ๐—ฐ๐˜‚๐—บ๐—ฝ๐—น๐—ถ๐—บ๐—ถ๐—ฒ๐—ป๐˜๐—ผ (bajos niveles de competencias, complejidad y fragmentaciรณn regulatoria, eficacia de los servicios de empleo, fiscalizaciรณn y justicia, entre otros).

Un punto particularmente relevante es la debilidad del diรกlogo social, reflejada en la baja densidad sindical y escasa cobertura de la negociaciรณn colectiva. ๐—ฃ๐—ฎ๐—ฟ๐—ฎ ๐—น๐—ฎ ๐—ข๐—–๐——๐—˜, ๐—น๐—ฒ๐—ท๐—ผ๐˜€ ๐—ฑ๐—ฒ ๐˜€๐—ฒ๐—ฟ ๐˜‚๐—ป ๐—ผ๐—ฏ๐˜€๐˜รก๐—ฐ๐˜‚๐—น๐—ผ, ๐—น๐—ฎ ๐˜€๐—ถ๐—ป๐—ฑ๐—ถ๐—ฐ๐—ฎ๐—น๐—ถ๐˜‡๐—ฎ๐—ฐ๐—ถรณ๐—ป ๐˜† ๐—น๐—ฎ ๐—ป๐—ฒ๐—ด๐—ผ๐—ฐ๐—ถ๐—ฎ๐—ฐ๐—ถรณ๐—ป ๐—ฐ๐—ผ๐—น๐—ฒ๐—ฐ๐˜๐—ถ๐˜ƒ๐—ฎ ๐˜€๐—ผ๐—ป ๐—ฒ๐˜€๐˜๐—ฟ๐—ฎ๐˜๐—ฒ๐—ด๐—ถ๐—ฎ๐˜€ ๐—ฝ๐—ฎ๐—ฟ๐—ฎ ๐˜๐—ฟ๐—ฎ๐—ป๐˜€๐—ถ๐˜๐—ฎ๐—ฟ ๐—ต๐—ฎ๐—ฐ๐—ถ๐—ฎ ๐—น๐—ฎ ๐—ณ๐—ผ๐—ฟ๐—บ๐—ฎ๐—น๐—ถ๐˜‡๐—ฎ๐—ฐ๐—ถรณ๐—ป ๐—น๐—ฎ๐—ฏ๐—ผ๐—ฟ๐—ฎ๐—น ๐˜† ๐—ฒ๐—น๐—ฒ๐˜ƒ๐—ฎ๐—ฟ ๐—น๐—ฎ ๐—ฐ๐—ฎ๐—น๐—ถ๐—ฑ๐—ฎ๐—ฑ ๐—ฑ๐—ฒ๐—น ๐—ฒ๐—บ๐—ฝ๐—น๐—ฒ๐—ผ. La brecha es evidente: en el Perรบ (2023), solo 6 % de trabajadores estรกn sindicalizados y la cobertura de la negociaciรณn colectiva apenas llega al 4 %. En Colombia y Chile, ya miembros de la OCDE, la cobertura bordea entre 16 % y 20 %, mientras que el promedio OCDE supera el 30 %.

Las recomendaciones recogen buenas prรกcticas de paรญses miembros con altos รญndices de desarrollo, e invitan al Perรบ a avanzar en una agenda integral:

* Facilitar el acceso a la sindicalizaciรณn y la negociaciรณn colectiva revisando la normativa sobre sindicatos, contrataciรณn temporal y subcontrataciรณn.

* Mejorar la representaciรณn de los trabajadores y garantizar un diรกlogo social significativo (negociaciรณn sectorial, รณrganos tripartitos, mecanismos de resoluciรณn de conflictos).

* Establecer un proceso transparente para ajustar el salario mรญnimo con base en inflaciรณn, productividad y costo de vida.

* Reformar regulaciones basadas en el tamaรฑo de las empresas (cotizaciรณn a seguridad social, utilidades, impuestos).

* Fortalecer la fiscalizaciรณn y la aplicaciรณn de derechos laborales (SUNAFIL).

En sรญntesis, la formalizaciรณn laboral no pasa por abaratar derechos, sino por consolidar un marco regulatorio moderno e instituciones sรณlidas.

La OCDE recuerda que es un desafรญo multisectorial que requiere la coordinaciรณn de polรญticas laborales, econรณmicas, fiscales y sociales.

Si el Perรบ aspira a integrarse plenamente a la OCDE, es el momento para que trabajadores, empleadores y Estado asuman el reto de construir polรญticas pรบblicas que trasciendan lo bรกsico y sienten las bases de una verdadera estrategia de formalizaciรณn.

Comparte el post en tus redes sociales:

Aรฑos combinados de experiencia en derecho laboral, negociaciรณn y asesorรญa legal pรบblica y privada.